Estos gatitos han sido abandonados a su suerte por una mala persona a la que no le importa el sufrimiento de los animales.
Es una costumbre habitual entre un sector de la población que posee animales de compañía sin prestarle la mas mínima atención, incluido la esterilización.
Cientos de gatos mueren todos los años en nuestros pueblos porque estas personas los abandonan con la esperanza de que otra gente corra con las consecuencias de su irresponsabilidad. Desgraciadamente estos gatitos suelen ser pequeños y sobreviven muy pocos días. La mayoría muere de sed, de hambre, de frío o como consecuencia de actuaciones humanas.
Afortunadamente nuestros protagonistas tuvieron suerte de ser rescatados a tiempo y también han tenido la gran suerte de ser adoptados por una buena familia de Prado del Rey.
Hoy viven felices en un hogar, son muy alegres y juguetones como corresponde a todo cachorro sano y disfrutan del cariño que sus dueños le negaron.
No hay comentarios:
Publicar un comentario