Así lo cuenta Mariluz:
"A Tuerti y a sus hermanos los dejaron abandonados una mala persona en la perrera de Los Barrios; estaban todos enfermos y desnutridos.
"A Tuerti y a sus hermanos los dejaron abandonados una mala persona en la perrera de Los Barrios; estaban todos enfermos y desnutridos.
Tuertito era el que peor estaba y por ello me lo pasó Mari Ángeles. Estaba muy malito y los ojitos los tenía con infección avanzada. Gracias a los veterinarios pudimos salvarle uno.
Nunca superó totalmente el miedo que traía desde su infancia, pero a mí me queria con locura. Creo que fue muy feliz.
Hoy he ido a sacarlo de la cabaña en donde dormía todas las noches y estaba muertecito, solo tenía 3 añitos y estaba fuerte y saludable.
¡Tuertito se ha llevado consigo un trocito de mi corazón!"
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