Este precioso gato de ojos grandes ha sido abandonado en una de nuestras colonias por una vecina que tiene la mala costumbre de abandonar a los pequeños que nacen en su campo. Ya ha abandonado anteriormente a otros gatos en distintas colonias. Al parecer la señora, (aunque disfruta de una vida acomodada) no quiere gastar dinero en esterilizar a sus gatas.
El gatito estuvo a punto de morir en una majada de cabras, en donde fué vista la señora soltando al gato. Allí no tenía agua ni comida. Pero como romanito es un luchador empezo a pegarse a los gatos de la zona y ahora es el rey de la colonia.
Aunque llegó con mucho miedo a los humanos, ahora ya está descubriendo que las personas también pueden ser buenas y ya se deja coger y hasta se atreve a ronronear.
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